Pyongyang, 28 de julio (ACNC) -- La subjefa de departamento del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, Kim Yo Jong, hizo pública el día 28 una declaración intitulada "las relaciones entre la República Popular Democrática de Corea y la República de Corea ya se liberaron irrevocablemente de la concepción de misma nación".

El texto completo va como sigue:

El cese de radioemisión con altavoces hacia la RPDC, la suspensión de lanzamiento de volantes, la permisión de turismo a la RPDC de los individuos de la RC…

Estos son los detalles de los "esfuerzos sinceros" que canaliza a su manera el gobierno de Lee Jae-myung desde el inicio de su mandato con un hilo de esperanza de mejorar las relaciones con la RPDC.

Por su parte, el ministro de Unificación, Jong Tong Yong, propuso abrir la hora de buena voluntad, reconciliación y cooperación dando fin al tiempo de responder a la intransigencia con la misma, al cabo de hablar de la resucitación de la paz desaparecida y la restauración de deterioradas relaciones Sur-Norte.

Últimamente, abriga una ilusión vana de invitar a alguien a la cumbre de cooperación económica Asia-Pacífico que tendrá lugar en Kyongju unos meses después.

No hemos hecho caso de quién se elige como presidente y qué política se traza en la RC ni hemos evaluado al respecto.

Pero, esta vez vamos a exponer nuestra clara posición.

A decir sobre el cese de la radioemisión de propaganda psicológica y tendenciosa anti- RPDC, de lo que describen las autoridades de la RC como primer señal de la recuperación de confianza entre el Sur y el Norte, eso es el problema de ellas, porque había sido causado por ellas mismas, y no pasa de ser una reversión del hecho que ellas no debían hacerlo.

Es decir, no merece ser apreciable.

Sería una gran equivocación si la RC, que en el pasado inculcaba la extrema confrontación calificando unilateralmente de enemigo principal a nuestro Estado, espera ahora cambiar con unas palabras sentimentales todos los resultados dados por sí misma.

Para nosotros no fueron el tiempo insignificante los años pasados que describió el gobierno de Lee como horas pésimas y estúpidas.

Sacamos la conclusión histórica muy importante de que la RC no puede ser nunca nuestra contraparte de reconciliación y cooperación, aunque ella profese la "democracia" o el "conservatismo". Y pudimos romper con el pasado muy fatigado e incomodado por la restricción de la expresión retórica de connacional y liquidar completamente hasta la concepción contradictoria a la realidad.

La RC presenta como tarea de la época la operación normal del Ministerio de Unificación que debe ser disuelto en la actualidad en que se perpetúan los dos Estados en la Península Coreana. El hecho confirma de nuevo que es invariable la naturaleza de los politiqueros de la RC, presionados en lo mental por el fantasma llamado la reunificación mediante la absorbición.

Teniendo en cuenta más de 50 días de mandato de Lee Jae-myung para no hablar del expediente de los poderes pasados de la RC, él habló a bombo y platillo del alivio de la tensión de la Península Coreana y de la mejora de las relaciones entre la RPDC y la RC, pero al igual que sus predecesores, deposita la confianza ciega en la alianza con EE.UU. y persigue el intento de enfrentarse con la RPDC.

El mundo verá pronto los humos de pólvora que se cernerían de nuevo más allá de la frontera al sur de la RPDC debido a los sucesivos ejercicios bélicos de gran envergadura de carácter agresivo. Y EE.UU. y la RC pretenderán utilizar su método rutinario de imputar a la RPDC la culpabilidad de la agravación de la situación de la Península Coreana, causada por sí mismos.

El gobierno de Lee Jae-myung arma alborotos como si hiciera todos los esfuerzos imparciales fingiéndose connacional de la RPDC para atraer nuestra atención y enfocar la opinión mundial, pero no habrá ningún cambio en la conciencia hostil de nuestro Estado sobre la RC ni se revocará el segundero de la historia que modificó radicalmente el carácter de las relaciones entre ambas partes.

Aclaramos de nuevo nuestra posición oficial de que no tenemos ningún interés en política u opinión que presente Seúl ni tenemos la necesidad de sentarnos con la RC ni un tema de discusión con ella.

Las relaciones entre la RPDC y la RC ya se liberaron irrevocablemente de la concepción de la misma nación. -0-