El Dirigente
Luego de estrechar la mano con el administrador de la granja, le preguntó cómo estaba.
Al darse cuenta de que algunas horas después llegaría el cumpleaños del Dirigente, ese funcionario le dijo que le daba pena tenerle en una parcela la víspera de su natalicio.
El líder antecesor le contestó que él no celebra su cumpleaños y salió de Pyongyang para averiguar el estado de preparación de las faenas agrícolas dejando a los funcionarios que le molestaban con ese tema.
El Presidente
Me complace más pasar mi cumpleaños realizando las visitas de guía para aliviar lo que le preocupa al gran Líder, expresó.
El Dirigente