Un día de agosto de 2014, el Secretario General del Partido del Trabajo de Corea, Kim Jong Un, visitó la Fábrica de Azulejos Chollima.

Al cabo de dar vueltas por varios puntos de la planta, el Secretario General paró su paso ante la sala de ensayos del terreno.

Un funcionario de la unidad le explicó que es el laboratorio del terreno y que allí los técnicos de la fábrica montaron por propia cuenta los equipos de producción de adhesivos y desarrollaron nuevos productos. Y expuso su decisión de investigar los materiales de piedra, diversificar los productos y mejorar su calidad.

El Secretario General reconoció el entusiasmo por el trabajo de este funcionario y se alegró diciendo que le agrada el establecimiento en el taller del laboratorio para el desarrollo de productos y el análisis de materias primas.

Tras escuchar las palabras de ese funcionario de que la planta produce y suministra los azulejos de buena calidad a los campos de construcción, el Secretario General subrayó a los acompañantes que debemos hacer lo todo con propias fuerzas y técnicas sin depender de otros.

Viendo la cadena productora de rejas, recalcó que la planta las produce por propia cuenta y la calificó de la patriótica y dandi.

En tal estima estaba reflejado el gran propósito del Secretario General de que los funcionarios y obreros de la fábrica produjeran muchos artículos excelentes dignos de enorgullecerse como lo nuestro con propias fuerzas y técnicas dando pruebas del espíritu revolucionario de autoconfianza. -0-