Francia debe dejar de amenazar la paz y seguridad del Nordeste de Asia

Pyongyang, 6 de octubre (ACNC) -- El investigador de la Asociación Corea-Europa, Ryu Kyong Chol, publicó el día 6 un artículo intitulado "Francia debe dejarse de las acciones que amenazan la paz y seguridad de la región del Nordeste de Asia".

Su texto íntegro sigue:

Se dice que Francia planea despachar en octubre el avión patrullero "Falcon 200" a las aguas periféricas de la Península Coreana, bajo el pretexto de vigilar las supuestas "actividades marítimas ilegales".

Esta decisión no es tan sorprendente si se toma en cuenta el comportamiento de ese país europeo que anteriormente, armaba escándalo mandando los buques de combate y aviones de patrulla a la zona marítima alrededor de la Península Coreana.

Nos parece mezquina la situación pobre de Francia que intenta elevar su posición con la participación en todos los años en la campaña de presión a la RPDC que patrocina EE.UU.

Pretextando la implementación de la "resolución de sanción" anti-RPDC del Consejo de Seguridad de la ONU, Francia intenta agravar la tensión despachando cada año desde 2019 sus fuerzas armadas a dicha zona marítima, lo cual entraña gran peligrosidad.

Recordemos en esta ocasión aquel tiempo en que el avión de patrulla "Falcon 200", desplegado en octubre de 2021 de la base aérea norteamericana de Futenma del departamento de Okinawa, Japón, llegó por primera vez al Mar Este de China para vigilar las "actividades marítimas ilegales".

Aquel entonces, la fragata china, que cumplía ahí la misión de patrulla, emitió una señal pidiendo la identificación al avión francés y, seguidamente, un caza chino realizó durante 25 minutos el vuelo para mantenerlo a raya.

Con respecto a esta situación tirante, los especialistas en el asunto de seguridad expresaron la seria preocupación opinando que se exacerba la tensión militar en la zona después de publicación de la "estrategia de Indo-Pacífico" por Francia.

Lo que no se puede pasar por alto es que Francia toma a Japón con ambición militarista como cabeza de puente para la materialización de su estrategia, si bien habla más que nadie de la paz y seguridad del mundo como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.

Sería una opción muy peligrosa si Francia intenta poner de relieve su presencia en la región de Asia-Pacífico recurriendo hasta a la cooperación militar con Japón, país criminal de guerra.

La intromisión del país europeo hace más complicado y peligroso el caso cuando debido a las acciones militares hostiles de EE.UU. y sus satélites, la situación político-militar de la Península Coreana se acerca cada vez más al estallido de guerra termonuclear en cualquier momento.

El proceder irresponsable de Francia, que quiere inmiscuirse en la situación regional de la Península Coreana y el Nordeste de Asia donde están enredados a más no poder los intereses de las potencias vecinas, no es más ni menos que la gran idiotez de meterse por sí sola en la trampa sin salida.

Le convendría pensar por adelantado que puede enfrentarse con los desafíos indeseados e imprevistos si anda metiendo la nariz en la región de Asia-Pacífico, que se convierte en una zona candente, pese a su situación embarazosa en África.

Francia debe ver correctamente la tendencia de la época calmando su fiebre de la Guerra Fría.

Actualmente, se alzan cada día más por doquier del Planeta las voces justas en contra de la demasiada intervención en asuntos internos por parte de Francia, ex metrópoli, y van en aumento los países y grupos que se oponen a su anacrónica política exterior.

En lugar de sentirse atraída por la anacrónica "diplomacia de cañonazos" imitando a alguien, Francia debe parar ahora mismo su peligrosa acción que vulnera la paz y seguridad de la Península Coreana y el Nordeste de Asia, antes de que se haga tarde.

Esto será provechoso también para ella misma. -0-

www.kcna.kp (Juche112.10.6.)