Ofrecida función conjunta de niños escolares por el aniversario 78 de fundación de ONC
Pyongyang, 6 de junio (ACNC) -- Tuvo lugar el día 5 en el Anfiteatro del Parque Juventud de la ciudad de Pyongyang la función conjunta de los niños escolares "Nuestra fiesta que celebramos en el regazo del Mariscal padre", dedicada al aniversario 78 de la fundación de la Organización de Niños de Corea.
La disfrutaron el jefe de departamento del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, Ri Tu Song, el presidente del CC de la Unión de la Juventud Patriótica Socialista, Mun Chol, los funcionarios de esta agrupación juvenil, los matriculados de la Escuela Revolucionaria de Mangyongdae y la Escuela Revolucionaria Kang Pan Sok, los participantes en los actos festivos de la efeméride, así como los niños escolares de esta capital.
En la escena iniciada con el prólogo "Marcha de la ONC", se presentaron diversas piezas que describen la imagen alegre de los integrantes de la ONC que se forman como futuros pilares de la Corea socialista.
Los ejecutantes cantaron en tono patético sobre las proezas indelebles de los Generalísimos
Arrancaron efusiva ovación del público varias piezas como el solo de canción folclórica y coro "Es el mejor nuestro Padre" que muestra el gran afecto del Mariscal
Se llevaron a la escena otras piezas alusivas a la vida digna y feliz de los niños coreanos que cultivan sus sueños y aspiraciones aprendiendo a todo querer en el régimen de educación socialista.
La función llegó al clímax cuando se interpretaron el solo de violín "Serie de canciones revolucionarias" y la danza "Continuaremos el espíritu de la juventud heroína", que patentizaron la voluntad de los integrantes de la ONC de marchar por la senda de fidelidad y patriotismo asimilando el noble mundo espiritual de los miembros del Cuerpo Infantil, organizado en el período de lucha antijaponesa, y los guerrilleros infantiles de la pasada guerra coreana (1950-1953).
La escena bajó el telón con la poesía y coro "¡Preparémonos siempre para la patria socialista!" y el epílogo "Padre afectuoso" que demostraron el juramento de nuevas generaciones de prepararse bien como continuadores de la revolución confiando únicamente en el Mariscal